Los dardos envenenados contra la Monarquía, en particular contra la reina Letizia que, por consiguiente, salpica al monarca, vienen desde diversos frentes. La prensa amarilla, los integrantes de los partidos separatistas, y los más sectarios comunistas que desean un cambio de régimen, han hecho una fabulación en común para desarrollar un plan de marketing antimonárquico que, fase a fase, tratan de lograr sus objetivos a largo plazo. El final del camino es vitorear una III República que lleve a España a 100 años de pobreza, a la división entre españoles, a la separación de Europa, a una dictadura nacional o por Comunidades que, tal vez, entonces se les llame estados o naciones. ¿De verdad es lo que quieren esos 10% de renegados, capitaneados por un despreciable ególatra que quiere erigirse como su Presidente? Si el Poder Judicial, el amparo de la Unión Europea o la propia decisión del Rey Felipe VI, no paran esta inconstitucional aberración, sólo existirá un nuevo alzamiento del Ejército y de los españoles que en su inmensa mayoría no están de acuerdo en volver a 1936. Su Majestad el rey no puede negarse a firmar leyes aprobadas (recordemos que la Ley de Amnistía es una proposición), ni puede ni le corresponde tomar decisiones políticas, ya que no está contemplado en la Constitución (Artº 62), que reconoce la soberanía del pueblo español. Además con el Artº 59, si se negara podría ser forzado a abdicar, con lo que la Princesa Leonor ascendería al trono de inmediato. Sin embargo, el Rey tiene el derecho de apelar al pueblo y someter a consulta de la Nación todo proyecto o cuestión que le haya propuesto el Presidente del Gobierno o bien por exigirlo así la propia Constitución para su reforma.
En cualquier caso, todos debemos ponernos manos a la obra para salvar al Rey de cualquier ataque contra la unidad, la convivencia y la paz de España. Nos jugamos mucho ahora y para el futuro de las nuevas generaciones.
“Las leyes no lo son en el régimen parlamentario hasta que se discuten y aprueban”. Emilio Castelar
José Jaime Navarro
