Ante el umbral
1 minuto de lecturaSus dedos de pluma-la puerta entornada- aletean al aire por si hubiera agua; en Sol bautizados vuelven a la casa. Abierta la puerta, su nariz escapa; hociquea el aire y no encuentra nada entre los aromas capaz de alarmarla. Ojos entornados sacan de la casa penumbras calientes y puertas cerradas; la noche les hunde luces como lanzas; no, no sienten miedo, no les amenazan los destellos blancos ni las sombras largas ni el fugaz desfile de serenas manchas. En el interior se abren como playas sus lacios oídos a una mar en calma; el roncar del viento mece la ventana. Más allá del aire, la mar traspasada, detrás de la noche, el silencio acaba. Una nauseabunda lluvia se desata. Su boca sin líneas, su cráneo sin cara, sus brazos hendidos, sus piernas taladas, del umbral de mármol vuelven a la casa. ________________ Ramón Ataz Poeta murciano Miembro de la Asociación Poético-Cultural Alaire, que falleció el 6 de mayo de 2013, a los 47 años.
