¿El genio nace o se hace? Con Leonardo Da Vinci sería difícil acertar cual es la teoría más adecuada, pero desde mi punto de vista las 2 encajan, porque 500 años después de su muerte el arte de este gran Genio y viva Alma del Renacimiento se mantiene más vivo que nunca, ni el paso del tiempo ha podido con él.
Fue ante todo un polímata. Destacó en escultura, pintura, filosofía, medicina, ingeniería, paleontología, botánica, música, urbanismo y anatomía; pero también destacó por la cantidad de historias que surgieron en torno a su figura, las cuales perviven aún hoy.
¿Era hijo de una esclava árabe? ¿era homosexual? ¿era seguidor de la Iglesia de los Cátaros y por eso vestía de blanco y era vegetariano? ¿Introdujo códigos secretos en sus obras? Sinceramente que cada uno sea libre de pensar, pero en una cosa coincidiríamos todos. Leonardo nació con visión de futuro, fue un adelantado a su tiempo.
Entre sus diseños se pueden apreciar un traje de buzo, un submarino, una ametralladora, cañones de gases venenosos, y eso que era pacifista, un cohete, un avión, un paracaídas e incluso una máquina muy parecida a la televisión. Esta última fue inventada por Leonardo ya en sus últimos tres años de vida, los que pasó en Francia, donde murió como invitado y protegido del Rey Francisco I de Valois. El invento era una caja en la cual y mediante el efecto de la luz, moviendo una polea, la gente de la corte viera imágenes en movimiento, pero el invento no llegó a funcionar. Sin embargo, sorprende que ese hombre, nacido en un pequeño pueblo de la Toscana, mostrara en sus obras inventos que 300 años más tarde Julio Verne plasmaría en sus novelas y que 100 años después ya eran y siguen siendo una realidad en los tiempos actuales.
Otro invento, y que, si llegó a funcionar, fue la creación de varios autómatas para la Corte Real. El más famoso de ellos es un león de oro que Leonardo fabricó para el Rey Francisco I cuando este reconquistó el Milanesado para Francia, y que fue un regalo del inventor al monarca. Echando una moneda el león se ponía a caminar, moviendo las patas, entonces abría la boca y expulsaba por ella flores de lis, el símbolo de la Casa Real de Francia. No nos cuesta imaginar la cantidad de aplausos que debieron de inundar la sala ese día.
Leonardo también diseñó varios de los trajes y escenarios para las mascaradas, carnavales y obras de teatro que se realizaban en la Corte de Francia, sobre todo en el Castillo de Amboise que está cerca del que Francisco I le regaló a Leonardo, el castillo de Clos-Lucé, y en el que el genio italiano murió el 2 de mayo de 1519 a la edad de 67 años. En su testamento pidió ser enterrado en la Capilla Real de Amboise.
Leonardo bebió de muchos textos de los genios de la antigüedad grecorromana y también de la oriental, árabes y persas, sobre todo, para perfeccionar sus inventos. Hoy en día su legado es mundial y bien conocido tanto en Francia como en Italia, y en España también, en donde su figura es tema de varios estudiosos.
El pasado 2 de mayo de 2019 en la Capilla Real de Amboise Sus Excelencias el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el Presidente de Italia, Sergio Matarella, rindieron homenaje al Genio del Renacimiento italiano y francés, colocando dos bellos ramos de flores en su tumba.
Que 500 años después aún perdure el genio de Leonardo, el hombre de las 1.001 disciplinas. Igual que la sonrisa de la bella Gioconda Mona Lisa.