El día 22 de noviembre tiene una importancia especial para todos los músicos, porque se celebra el día de su patrona, Santa Cecilia, una patrona muy original, puesto que ella no tocaba instrumento alguno, pero así ha quedado in secula seculorum y así la respetamos, celebramos y conmemoramos los músicos. Pero yo creo que, un poquito se siente implicado todo el mundo, aunque no sea músico profesional, igual que la propia patrona, porque la música eleva el espíritu y es capaz de empatizar con cualquiera de los estados de ánimo que tengamos. Con razón dijo Platón: “La música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo”, una comparación muy adecuada, puesto que, en la Antigua Grecia, tanto la música como la gimnasia eran muy importantes.
Mens sana in corpore sano, expresión utilizada por Juvenal (60-128), quien, en su Sátira X, la empleó, en el sentido religioso de “oremos por una mente sana en un cuerpo sano”. Y hoy en día, sabemos que para conseguir una mente sana es muy importante escuchar música, según el estado de ánimo, nos puede ayudar una marcha (en sus distintas variedades: militar, fúnebre, nupcial…, un pasodoble, un vals, un aria de ópera o de zarzuela, una sinfonía, etc. Los griegos la utilizaban hasta para sus tragedias (precisamente por querer reconstruir las antiguas tragedias griegas, crearon las favolas, drammas per música… y desembocó en las óperas)
Es un lenguaje que se entiende sin palabras. Se trata de un “Bien de interés cultural”, sobre todo en España, y no digamos en la Comunidad Valenciana: una de cada tres bandas ya es centenaria. Siempre me ha llamado la atención que, a veces, visitando pueblos pequeños, muy pequeños, sin embargo, tienen dos o tres bandas, en la Comunidad Valenciana, y compiten entre ellas. Por eso, encontramos músicos españoles esparcidos por todo el mundo, son reclamados por su musicalidad especial.
De músicos y poetas todos tenemos un poco, así que, celebremos este día todos los músicos profesionales y los amantes de la música. ¡Viva la música!
