Mahsa Amini murió hace ya un año tras la brutal paliza que le propinaron los matones de la Gestapo islámica, o como ellos se llaman, policía de la moral, moral que brilla por su ausencia al golpear hasta la muerte a una chica que tenía toda la vida por delante y solo por no llevar hiyab, la prisión de las mujeres en Irán.
Y a pesar de las 500 muertes, aunque hubo más y un día saldrá la cuenta total, las detenciones, torturas y ejecuciones que ha habido desde entonces por orden del gobierno, ya no hay marcha atrás, es como si algo se hubiera despertado dentro de los iraníes, como quien deja de estar ciego o despierta tras 44 años de sueño forzado y pierde el miedo. El fuego del Simurg, ave mítica y parecida al fénix en el folklore persa, se ha encendido para que Irán renazca de sus cenizas.
La victoria, a pesar de que aún quedarán meses, está ahora más cerca de ser ya real y no un sueño
Desde ayer día 16 hay manifestaciones contra las embajadas iraníes por todo el mundo, iraníes y no iraníes marchan para poner fin al régimen usurpador de Irán, implantado por el Ayatolá Jomeini y que ha secuestrado la libertad de Irán desde 1979. Aquí en Madrid, Valencia, Barcelona y Gijón hubo manifestaciones contra las embajadas y consulados iraníes, la gente estaba portando la antigua bandera iraní, fotos de Mahsa Amini, de los otros asesinados o del hijo del Shah para quienes lo apoyan en una restauración en el futuro, que solo se podrá elegir en plebiscito.
Y aunque no lo consideren, también esto nos afecta a nosotros, no solo por los iraníes que aquí viven y que desearían tener una transición iraní a lo 1978 como la española, sino porque desde hace ya casi un año el español Santiago Sánchez Cogedor sigue preso en la prisión de Evin, una de las peores del régimen, acusado falsamente de espía, cuando solo estaba de paso por Irán para ir al Mundial de Qatar y quiso visitar la tumba de Amini. ¿Dónde está el gobierno español y a qué espera para traerlo a casa? ¿Por qué seguimos teniendo tratos diplomáticos con un régimen que ha cometido crímenes contra la humanidad? El silencio es la peor respuesta que uno hallará.
Pero no pierdo la esperanza, no debemos perder la esperanza de que las tornas cambiarán. Irán se parece mucho a España en cuanto a cultura, historia y clima y no lo digo por decir, mis amistades iraníes exiliadas aquí aman a España por su buena acogida, pero también por su historia, clima y cultura general, porque les recuerda mucho a la suya antes de la revolución islámica. Cada vez en las calles hay más mujeres sin velo que han perdido el miedo, gente que baila y toca música, cosas que hasta hace unos años parecían imposibles de verse.
Confío plenamente en la perseverancia de los iraníes, esa perseverancia de la que Unamuno dijo que es la mejor arma para vencer y convencer, en contraposición a la fuerza bruta y la conquista. Irán tendrá este 2023 un Annus Victoris y si no es este lo será el siguiente, pero la República Islámica no celebrará su 50 cumpleaños en 2029 como que me llamo Conde Bevilacqua Benedetti.