Si casi nunca te han dicho que eres bella no es preciso, ni tú lo necesitas. Las ansias de ser tu fiel amigo son infinitas. Te admira el cielo, y no te dice nada, pues el querer verdadero es casi mudo. Es casto el aire porque está desnudo. Es bello el cielo porque tiene estrellas. Son tus manos de tanta dulzura, que son como un rayo de sol..., y mi estrella.