Despido este 2022 con este artículo y haciendo honor a su título, porque fue el mejor discurso, junto al de 2017 cuando el 1-O, que Su Majestad dio y que hizo llegar a cada salón de España. No me importa a quienes no les interese la figura del Rey, pues para eso existe la libertad de expresión y de ideas, pero lo que no tolero es la soberbia de quienes han nacido creyéndose poseedores de la verdad absoluta, de estar por encima del bien y del mal y que usándolo como excusa atacan al que para muchos de nosotros, es el mejor embajador y custodio de los derechos del pueblo español.
Su Majestad habló de la actualidad nacional e internacional y de los riesgos que la democracia corre hoy en día, así como los conflictos que debe hacer contra quienes pretenden destruirla, usando como método la erosión de las instituciones y la falta de respeto a la Ley y a la Constitución.
Su Majestad también defendió y yo lo aplaudo, el valor que recoge la herencia de la Transición, y que si fue posible ese momento es porque todos colaboramos, la sociedad española de 1978 pese a sus diferencias tenía un proyecto en común. Unirse en un futuro mejor.
La sociedad de 2022 es sin embargo una sociedad polarizada, que recuerda a la de 1936 y al ´´Si no estás conmigo estás contra mi y mereces lo peor de este mundo que pueda pasarte´´ ¿De verdad merece la pena?
Les diré al gobierno y sus socios que España no es una finca ni un feudo que puedan repartirse entre ellos y explotarlo como se les antoje, si así lo creen, no merecen llamarse políticos ni sentarse en el Congreso.
España es un país con uno de los legados más antiguos del mundo, hemos sido parte de mucho y hemos vivido de todo, en lo bueno y en lo malo, pero siempre encontramos la capacidad de reinventarnos pasa salir airosos y con una versión mejor que la anterior de nosotros mismos.
Este discurso me llegó al alma y espero que lo sintieran igualmente los 6´5.000.000 de personas que lo siguieron. Pueden tener cada uno sus ideas y pensar que la monarquía puede aún servir al pueblo o no o que hay que reformar la Constitución, pero jamás apoyar proyectos dinamiteros cuyo único propósito es barrer 44 años de democracia. Jamás.
Añadiré que los intentos de desprestigiar la figura del Rey por parte de los socios de gobierno es cada día más pobre al igual que su sagacidad política, como poner una foto de Felipe VI de niño y dándole la mano a Franco y con el título ´´No olvidemos nuestros orígenes´´ pues debo decir que el Sr Rufián aparte de pobre como político, está falto de creatividad y conciencia histórica, pues que yo sepa ni un solo retrato de Franco aparece ya en despacho alguno. Que pobre es el Sr Rufián como toda esa coalición tan yerma y carente de sentido político y de futuro mejor. No diré nada más.
Majestad, gracias por ese discurso y a por el del año que viene.
¡FELIZ 2023 A TODA LA HMNE!
