Verdaderamente es importante cultivar valores morales; poco a poco se están perdiendo en la ociedad y es una pena, porque con ellos, se pierde también muchas cosas. La monarquía, sin embargo, aprende lo que son valores y a educarse en ellos desde la más tierna infancia, tal y como se puso de manifiesto en la primera sesión de las Jornadas sobre valores humanos que ha organizado la HNME, en su delegación de Alicante, el pasado lunes, 10 de febrero de 2020. En ella intervinimos cuatro ponentes y una moderadora, además de las palabras introductorias, muy bien explicado en la crónica que aparece en la Portada de esta semana, realizada por don Ramón Palmeral, colaborador asiduo con esta revista digital, en Opinión. Yo hablé de los valores, en general, como Doctora en Filosofía y Presidenta de Espejo de Alicante, para introducir el precioso tema, citando a psicólogos y filósofos estudiosos de los valores, como Piaget, Kohlberg, Gilligan y, por último, Rest y Knowles, quienes hicieron estudios conjuntos, pero me centré, sobre todo, en Kohlberg, que define la moralidad como «el reconocimiento de la distinción entre el bien del mal o entre lo que está bien o no, el respeto y obediencia por las reglas de conducta adecuadas, la disposición mental o comportamiento que produzca buenos resultados«
Se puede resumir en el esquema los tres niveles de desarrollo y las seis etapas de desarrollo moral que establece Kohlberg, para, a continuación, hacer una reflexión de los valores que rigen o deben regir los valores morales de la sociedad civil: seguridad, unidad, cohesión, tolerancia, rigor, solidaridad, respeto, lealtad, libertad, amistad, orgullo y humildad, empatía, fidelidad a España y conciudadanos, honestidad, tolerancia, serenidad, prudencia, sentimiento fraternal, amor, creatividad, equilibrio, reciedumbre, templanza y justicia, comentando, a continuación, que estos valores son los mismos que tiene la monarquía y la Corona, que fui citando en el romance que presenté en el Certamen de poesía que convocó la HNME en su IV edición, el año pasado, obteniendo el primer premio.
Seguidamente, la Doctora en Psicopedagogía, Doña Mª Luisa García González, escogió uno de los valores fundamentales en la sociedad civil, la amistad, que fundamentó perfectamente,hablando de la importancia que tienen los amigos.
A continuación, la escultora Teresa Cía habló de un valor humano que sirve no solo a los artistas, sino que puede salvar muchas situaciones, a cualquier nivel, comentando el hecho de que el Museo del Prado se inició por el Rey Carlos III. El núcleo original de las colecciones que allí se encuentran procede de la monarquía española y hoy en día, se puede afirmar, sin lugar a dudas, que es uno de los más importantes de Europa. De todos es sabido que la monarquía española ha sido mecenas de grandes artistas, a lo largo de la historia.
Por último, finalizó Ramón Palmeral, escritor y crítico, además de pintor, que habló de los Valores recogidos en su libro Tus zonas de éxito, y defendió la Constitución española, apostando por la importancia de cumplirla y hacerla cumplir; defendiendo al Rey, figura indispensable en España, ya que es garantía de su unidad y otros aspectos quemenciona él mismo en la portada de esta semana.
La moderadora, Doña Ana Estevan, catedrática de música en Secundaria, Vicepresidenta segunda de la HNME y otros cargos, cerró la mesa haciendo un resumen de lo que hablaron los ponentes, resaltando la importancia de los valores, en general y de la monarquía, en particular.
Sinceramente, pienso que no se puede vivir sin valores y es muy importante que se fomenten desde todos los niveles: familia, colegio, universidad, formación profesional… es un tema inagotable en todos los ámbitos, ¿Cómo se va a pedir respeto, solidaridad… a la monarquía, si no se tienen esos valores?
¡Viva España! ¡Viva el Rey! ¡Viva la Constitución!
