Permitidme que para presentar este libro me refiera, en primer lugar, a una de las personalidades más importantes de la Hispanidad en los últimos tiempos, Su Majestad la Reina Doña Sofía por su patrocinio constante, durante más de 30 años, de la ONG Proyecto Hombre, que desde 1984 acompaña a miles de personas con problemas de adicciones, en el tratamiento, rehabilitación y reinserción social y laboral con el objetivo de recuperar sus vidas.
Doña Sofía también es Prioste de Honor de la Cofradía Internacional de Investigadores de Toledo, además de una incansable estudiante de Antropología, siempre interesada y con conocimiento directo de la realidad de España y de Hispanoamérica.
Teniendo en cuenta la importancia crucial que tiene la investigación en la construcción del futuro y las actividades humanitarias, creo que mis sentimientos de profundo respeto, gratitud y admiración por ella también pueden ser compartidos por millones de personas de los dos lados del océano.
Este libro que quiero presentar no es un panfleto que dice: “Drogas No”. La realidad de la vida inconsciente es compleja y corresponde a una lógica sin negación, aunque parezca ciertamente extraño. Por eso, además de hablar de antropología y psicología será necesario hablar de lógica. Tampoco trata de banalizar y no dar importancia a un problema personal y social que con seguridad la tiene. Aunque ya hace tiempo que no aparece en los medios.
Sencillamente trata de describir con datos una realidad y explicar por qué el psicoanálisis es necesario para interpretar los contenidos inconscientes de la irracionalidad y las adicciones.
¿Cómo podemos resumir esa realidad? Podemos decir que el uso recreativo de las drogas ilegales pasa a convertirse con facilidad en consumo frecuente y después, abuso, dependencia y adicción, con importantes desajustes psicológicos; emocionales, sentimentales, familiares, laborales y sociales.
El deseo irrefrenable de consumir se agrava por una intensa sensación de incomprensión y de que “no hay salida”. Y si se consigue evitar el consumo, son frecuentes las recaídas.
Antes hay que aclarar que, la adicción es un problema psicológico y social, que tiene consecuencias de deterioro cerebral, pero no es una enfermedad cerebral que se pueda resolver solo con medicación; y precisamente por eso, posiblemente sea necesario que nos preguntemos si es útil y conveniente volver al viejo psicoanálisis para tratar con mayor profundidad la vida inconsciente, la irracionalidad en general y las adicciones en particular.
Este libro, trata de explicar por qué el psicoanálisis está indicado para evitar las recaídas en las adicciones. Y también por qué es necesario un periodo de abstinencia antes de comenzar el tratamiento psicoanalítico.
No plantea los resultados de la investigación en psicoanálisis como un saber que pretende imponerse, sino como un valioso dispositivo de escucha de la vida inconsciente del consultante.
¿Qué puede aportar el psicoanálisis al tratamiento de la irracionalidad y las adicciones?
El psicoanálisis posibilita un enfoque holístico de la mente humana abordando las diferentes dimensiones de la identidad personal del paciente. Permite elaborar, diacrónicamente, una idea más aceptable de sí mismo mediante una reconstrucción que vuelva a dar un nuevo significado a los contenidos de su intimidad. Relaciona la biografía
con la personalidad y el síntoma. Progresivamente va desvelando los códigos de interpretación de la realidad que son diferentes en función de cada biografía.
La escucha analítica, en atención flotante, no es acecho del síntoma, es desactivación de la carga traumática y devolución de las partes buenas, olvidadas entre los escombros de la represión y la culpa.
El drogadicto no puede encontrar respuestas a la pregunta inicial, aunque intente justificarse diciendo que se droga porque quiere, porque le gusta, porque lo necesita, porque pasa de todo, porque está harto, porque le calma, porque flipa, porque prefiere anestesiarse, porque es su medicina…
Pero el terapeuta que hace esta pregunta, conociendo la naturaleza inconsciente del proceso debe manejar las aportaciones del psicoanálisis, para ayudar a encontrar la salida del laberinto mental en que se encuentra el paciente.
Este puede ser un libro de utilidad para terapeutas, pero también puede ser compartido con pacientes y familiares, para compartir la certeza de que, a pesar de las dificultades, es posible comenzar a vivir de forma más saludable y dejar de sufrir y hacer sufrir a los que le rodean.
Dr. Francisco Javier Sedano Pérez
Instituto Psicoanalítico de Salamanca
Comendador de la H.N.M.E.
